Luis García Postigo, uno de los delanteros más técnicos que ha tenido México, tuvo una presencia breve pero contundente en las Copas del Mundo para la Selección Nacional.
Fue parte de dos equipos mundialistas, jugó el Mundial de Estados Unidos 1994 y fue convocado también para Francia 1998, aunque en este último no disputó ni un solo minuto. Su verdadera huella quedó en la edición del 94, donde fue titular, figura y goleador.
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En Estados Unidos 94, García llegaba como el referente ofensivo del Tri. El equipo venía de una ausencia de ocho años en Mundiales tras la sanción por los cachirules. Llegaban al duelo ante Irlanda con la clasificación en riesgo tras perder el primer partido. Y ahí apareció el ahora analista. Marcó dos goles frente a los irlandeses que cambiaron el rumbo del torneo.
Ambos golazos, con la pierna derecha desde fuera del área, que aún viven en la memoria de los aficionados aztecas, al minuto 44 y al 66.
Cuatro años más tarde, fue considerado para integrar la lista final rumbo a Francia 98. Fue el último Mundial al que asistió. Sin embargo, no vio acción en ninguno de los partidos que disputó México en ese torneo. No sumó minutos y terminó su historia mundialista en la banca.
En total, Luis García estuvo en dos Copas del Mundo, pero solo jugó una. Y en esa única oportunidad que tuvo, respondió con un doblete que clasificó a México y lo colocó como figura indiscutible del torneo. A veces no hace falta estar en muchas ediciones para dejar marca. Él lo hizo en un solo Mundial.
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