El líder Toluca entendió un poco tarde que la Liguilla había comenzado, tanto que estuvo a punto de regresar al Nemesio Diez con una importante desventaja, pero al final, la derrota (3-2) por un gol de diferencia ante el Monterrey, no se ve tan determinante.
Rayados dio la campana al derrotar al líder, mas irá a la vuelta sólo por un gol adelante, lo que parece poco para asegurar el pase a las semifinales.
Buen inicio de Liguilla, cinco goles en el primer partido, y todo está abierto.
Pero el juego comenzó como si fuera de la Jornada 4 del torneo regular, con ambos equipos a la espera de una acción, para reaccionar en torno a esta. Los dos se quisieron aguardar, el juego se volvió pesado, de poco espectáculo.
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Cuando Monterrey tenía la pelota, el camino a la portería rival era largo. Nelson Deossa no aparecía debido a la presencia de Sergio Canales. No se entienden en la cancha. Parece que se estorban.
Toluca es más dinámico. En cuanto se hacen de la posesión las alas se abren, Alexis Vega se sube a la motocicleta y quiere inquietar.
Pero el cero se rompe gracias a un autogol, en la única acción en la que Jesús Gallardo llegó a línea de fondo. Su centro fue raso y potente, el “Toro” Víctor Guzmán metió la pierna y venció a su portero (16’).
Pero la temática no cambió, el panorama fue el mismo. Hasta que Deossa pasó por encima de la jerarquía de Canales, en vez de pasar decidió tirar y eso fue suficiente para vencer a Pau López, previo desvío de Héctor Herrera (44’).
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El buen momento de Monterrey duró hasta el inicio del segundo tiempo. Stefan Medina vio solo a Canales en el área y el español cruzó con potencia al portero toluqueño para dar la vuelta al juego (50’).
Toluca se descontroló, perdió las formas. Vino una jugada de fantasía entre Canales, “Tecatito” y Germán Berterame, que terminó en un gol que fue anulado gracias al VAR por mano previa del español.
Pero ni así el Toluca reaccionó. Jesús Gallardo se lo olvidó que ya no juega en Monterrey, retrasó el balón, se lo dio a Berterame quien con facilidad se quitó el portero español para meter el tercero (69’).
Era el momento de los Rayados, el tiempo de matar, pero les faltó oficio.
Falta cerca del área de Rayados, la pelota fue al punto de penalti y Luan García remató (82’) para poner las cifras definitivas, por lo menos en la vuelta.