La Copa del Mundo de Francia 1938 es recordada por muchos factores.
Jules Rimet, uno de los fundadores de la FIFA y a quien se le atribuye la idea de crear los mundiales, presionó para que el torneo se realizara en su país, porque los aires de guerra, la Segunda Guerra Mundial, se asomaban en el ambiente europeo.
También es recordada porque sólo jugaron dos equipos del continente americano: Brasil y Cuba y uno del asiático, las Indias Orientales, los restantes fueron europeos.
En la final, Italia-Hungría, es famoso el telegrama que el “Duce”, Benito Mussolini, le mandó a su técnico Vitorio Pozzo, con el siguiente mensaje: “Vencer o morir”, una amenaza muy directa y que se cumpliría en caso de que los italianos no ganaran el torneo, lo que al final hicieron.
Pero lo que nadie ha podido responder, averiguar es… ¿Dónde quedó el zapato de Leónidas?
¿Quién era Leónidas?
Dentro de la historia de los mundiales, Brasil siempre ha destacado y sus futbolistas, sus grandes delanteros, se han vuelto figuras, o leyendas.
Pues quien comenzó esta tradición, fue Leónidas Da Silva, llamado “La Perla Negra”.
El delantero, quien ya había jugado en la Copa del Mundo de Italia 1934, fue encontrado en las playas de Río de Janeiro, jugando como todos acostumbraban: descalzo.
Cuando comenzó a jugar de forma profesional en el Bonsucesso, dicen los que lo conocieron, que no se acostumbraba a jugar con zapatos, que cuando no se daba cuenta el técnico, se los quitaba porque así estaba más cerca del balón.
Además, al atacante se la atribuye la invención de la bicicleta, esa forma en que los delanteros bailan sobre la pelota, para tratar de despistar a su rival.
Pero al final, se tuvo que acostumbrar a calzarse y así forjó su carrera profesional, jugando en Uruguay y también en el famoso Vasco da Gama.
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¿Dónde quedó el zapato de Leónidas?
En la Copa del Mundo de Francia, Brasil comenzó a destacar. El torneo comenzó en la ronda de octavos de final, donde el delantero metió tres tantos en el triunfo 6-5 sobre Polonia.
Pero iba para más… En cuartos, los americanos derrotaron 1-0 a Checoslovaquia, con un tanto más de su figura.
Llegaron las semifinales y Brasil fue vencido en polémico duelo contra Italia 2-1, muy favorecidos por el arbitraje europeo. Ahí Leónidas no hizo gol, porque estaba lesionado, no jugó…
Por primera vez en la Copa del Mundo se realizó el juego por el tercer lugar, en los amazónicos se enfrentaron a Suecia 4-2… Y ahí vino lo que agrandó su leyenda.
Cuenta quien los vieron, que Brasil perdía 1-2, y la moral se les venía abajo. Fue cuando la estrella apareció, entre bicicletas y recortes, se quitó a toda la defensa y cuando quiso tirar, su pierna se trabó en el campo lleno de barro, inundado por la lluvia… Leónidas hizo un gran esfuerzo para lograr sacar su pierna y esta salió a la luz, pero sin el zapato y el delantero, al ver que estaba en su estado natural, como en Río, no dudó y golpeó el balón que entró a la portería.
¿Qué pasó después? Brasil ganó el partido, Leónidas anotó otro gol para coronarse campeón de goleo, pero eso lo hizo con un zapato nuevo, porque el otro, el que casi le impide hacer el tanto de valioso empate, nunca apareció.
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