La Copa del Mundo es sin duda la vitrina de los inmortales. A lo largo de los años, son muy pocos los jugadores que han logrado bordar su nombre en el torneo más importante de la FIFA.
Pelé todavía ostenta la marca de jugador más joven en anotar en un Mundial; Miroslav Klose se convirtió en el máximo goleador de dicho campeonato. Sin embargo, hay una marca que luce complicada que algún día se pueda superar: jugar tres ediciones con diferentes selecciones.
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¿Quién jugó tres Mundiales con diferentes países?
En los inicios del futbol, estaba permitido que los jugadores representaran a diferentes países en la Copa del Mundo. Ferenc Puskás lo hizo con Hungría (1954) y España (1962) o José Altafini con Brasil (1958) e Italia (1962).
Sin embargo, con la profesionalización del deporte, la FIFA lo prohibió. Ahora un jugador únicamente puede ser elegido por una nación y participar de esta manera durante la máxima justa.
Sin embargo, por más increíble que parezca, en la era moderna hay un futbolista que logró la ‘hazaña’ de estar en tres Mundiales diferentes y los hizo en cada una de ellas con distinta selección.
Se trata de Dejan Stankovic, mediocampista que es recordado por su exitoso paso en el Inter de Milán y que entre sus proezas tiene la marca, insuperable, de disputar con tres países la Copa del Mundo de la FIFA.
Stankovic inició su camino en el Mundial a los 19 años con el representativo de Yugoslavia, donde incluso marcó un gol a Alemania. Su escuadra cayó en Octavos de Final ante Países Bajos.
Ocho años y con la disolución de Yugoslavia, Dejan acudió a Alemania 2006 con Serbia y Montenegro, aunque en esa ocasión no pudieron hacer mucho y se quedó en fase de grupos.
Ese mismo años Serbia y Montenegro se separaron, por lo que Dejan Stankovic, nacido en Belgrado, se unió a las filas de los serbios, que lograron clasificar a la Copa del Mundo de Sudáfrica 2010.
De esta manera, el mediocampista marcó un hito debido a que jamás un futbolista había defendido tres playeras diferentes en ese mismo número de Mundiales. Actualmente, luce bastante complicado que alguien pueda igualar o superar su historia.
