El futbolista brasileño, Coutinho, cerraba los ojos en plena entrevista mientras al fondo un particular sonido distraía la labor periodística tras la práctica del Vasco de Gama. Una sonrisa incómoda se dibujó en el rostro del mediocampista; y no, no fue provocada por alguno de los cuestionamientos.
El exfutbolista del Barcelona dirigió su rostro hacia la derecha, de donde se puede intuir, provenía el peculiar ruido. La sonrisa incómoda pasó en cuestión de segundos a transformarse en una cara seria que mezclaba preocupación y hasta cierto punto, molestia e inconformidad.
La intuición del brasileño no erró, aquellos sonidos eran detonaciones de armas de fuego que fueron grabadas durante la entrevista. Todos los involucrados en el metraje, el futbolista y el camarógrafo, mantuvieron la calma y se mantuvieron en paz y estoicos pese al peligro que una bala perdida pudiera representar.
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El centro de entrenamiento del Vasco de Gama se encuentra en la zona poniente de Río de Janeiro. ‘Ciudad de Dios’, una de las favelas más conocidas del territorio y que incluso tiene una película ganadora de múltiples premios.
Una ola de violencia ha azotado a la región en las últimas semanas. Apenas este lunes un integrante de las fuerzas especiales de la Policía Civil fue asesinado durante una redada. En la operación, se hicieron múltiples detonaciones con arma de fuego, lo que obligó al cierre de una autopista durante media hora.
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Globo, medio que estaba realizando la entrevista, destacó que el equipo “proporcionó las condiciones necesarias” para la grabación en el centro Moacir Barbosa, además de destacar que tanto club como sus trabajadores, incluidos los futbolistas, sufren de esta misma violencia día a día.