Cuauhtémoc Blanco fue genio y figura dentro de la cancha, lo que sin duda lo llevó a convertirse en uno de los últimos jugadores emblématicos del futbol mexicano.
Uno de sus grandes momentos lo vivió en el Mundial de Francia 98. Cada que tocaba el balón era imposible que se lo arrebatara. Además, metió un golazo y mostró al mundo su máxima creación: la ‘cuauhtemiña’.
Lee también Mundial 2026: Estas son las fechas de los 13 partidos de la Copa del Mundo que se jugarán en México
¿Qué es la ‘cuauhtemiña’?
En el primer partido de la Copa del Mundo ante Corea del Sur, México no la pasó bien por un lapso importante del partido, debido a que los orientales estaban arriba en el marcador.
Sin embargo, Cuauhtémoc Blanco demostró que siempre había tiempo para sacar la magia. En una jugada que parecía perdida por la banda izquierda, el mexicano tenía encima la mara de los rivales.
Fue entonces cuando el Cuau frotó la lámpara para que todos quedaran boquiabiertos con la ‘cuauhtemiña’. Con ese movimiento se sacó de encima a los coreanos.
Blanco detuvo el balón con las piernas y con un salto hacia al frente había realizado una de sus mejores jugadas. Tras la victoria de la Selección Mexicana, fue uno de los temas más hablados.

Para el duelo ante Bélgica, Cuauhtémoc Blanco ya no sacó su obra maestra, pero marcó un golazo. Se lanzó con las piernas por delante y con parte externa del pie izquierdo la mandó a guardar.
El Divo de Tepito no se quedó con las ganas de una vez más sacar la ‘cuauhtemiña’. En el partido de Octavos de Final ante Alemania, una vez más Cuauhtémoc se quitó a sus marcadores con esa jugada.
Posteriormente, Blanco la incluyó en su repertorio y la usaba tanto en la Selección Mexicana como con el América. Sin embargo, jamás igualó el impacto que su muestra de genialidad con el balón tuvo en un Mundial.