Cuando se habla de finales de Copa del Mundo, es imposible no pensar en Alemania. Ninguna selección ha estado tantas veces en el partido decisivo como ellos. Ocho presencias en total, un récord que refleja la grandeza y regularidad que tiene el país en la historia del torneo.

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¿Cómo le ha ido a Alemania en Mundiales?
Desde su primera aparición en 1934, los teutones se acostumbraron a pelear por lo más alto. Su primera final llegó en 1954, cuando protagonizó el famoso 'Milagro de Berna' al vencer a la Hungría de Puskás.

Luego repitió en 1966, 1974, 1982, 1986, 1990, 2002 y 2014. En total, ganó cuatro títulos (1954, 1974, 1990 y 2014) y perdió otros cuatro, pero siempre con la huella de un país destinado a jugar instancias definitivas.
Lo suyo no ha sido solo llegar, sino también la filosofía con la que ganan. En los 70, con Beckenbauer y compañía, impusieron un estilo de poder físico y orden táctico. En 1990 confirmaron su hegemonía en Europa con una generación férrea. Y en 2014, con futbolistas como Klose, Lahm y Müller, renovaron su identidad con un fútbol dinámico y moderno que conquistó Brasil.

Es cierto que en los últimos dos Mundiales vivió fracasos históricos al quedar fuera en fase de grupos, pero su legado no cambia. Alemania es la selección que más veces ha peleado por la Copa y la que mejor representa la regularidad en la élite mundialista. En 2026, buscará volver al protagonismo del futbol mundial al que tiene acostumbrado a todos los aficionados.