Javier Aguirre no sabe lo que es vivir un proceso mundialista tranquilo al frente de la Selección Mexicana. Fiel a su personalidad, el entrenador vive con mucha intensidad los partidos desde su área técnica.
Esta es la tercera ocasión que el Vasco se sienta en el banquillo nacional. La segunda y, quizás la más polémica, fue de cara a la Copa del Mundo de Sudáfrica 2010, donde previamente perdió la cabeza y agredió a un rival con una certera patada.
Lee también ¿Por qué Chicharito Hernández está vetado de la Selección Mexicana?
¿Por qué Javier Aguirre pateó a Ricardo Phillips?
Javier Aguirre vivió uno de sus episodios más vergonzosos al frente de la Selección Mexicana en la Copa Oro 2009. Ante Panamá sus dirigidos estaban mostrando muchas inconsistencias en la cancha y no lograban destrabar el juego.
En una jugada cerca del final del segundo tiempo, el panameño Ricardo Phillips evitó que el esférico saliera por la , justo en la zona donde estaba parado Javier Aguirre, quien perdió la cabeza y pateó al rival.
El ‘Patón’ Phillips, no dudó un segundo y de inmediato respondió empujando al entrenador. Manuel Vidrio, auxiliar de Aguirre, entró al quite para defenderlo y se armó un conato de bronca.
Con el pasar de los años, Javier Aguirre reveló que no se arrepiente se esa acción, ya que si bien es reproblable, quería que sus jugadores se contagiaran y mostraran enjundia en el terreno de juego.
“Los regañé, porque tuve que dar una patada que ellos no se atrevieron a dar en el campo. Puse el ejemplo, mal, pero se los puse. Tenía los ojos inyectados de sangre, nos estaban comiendo el terreno. Hay una jugada que lo ejemplifica, bueno dos, una se barre mi capitán Torrado, el rival salta y lo pisa, nadie le dijo nada. La otra, va un balón aéreo, Ochoa lo sigue, se cuelga del arco y viene el delantero de Panamá y lo estampa contra la portería, los centrales en vez de ir a defender a Ochoa o mentarle la madre al rival, casi le piden perdón”, contó en charla con Liga MX.
El Vasco agregó que no podía creer la actitud de sus pupilos, por lo que se llenó de impotencia y la sacó con un certero golpe ante el canalero, quien no se dejó y también le dejó un recuerdito.
“No podía más, algo tenía que hacer, el negrito ese, sale el balón, se quiere hacer el vivo y le meto una patada, le pido perdón y me voy. Le dije a mis jugadores, cabrón tengo que hacer su trabajo, si te están pasando por encima, por lo menos que se vea actitud, que se vea garra”, concluyó.
